Ya no sólo por la falta de anuncios, de esos productos ricos de la huerta navarra, o de algunas empresas de la zona. No es tampoco porque ya no se anuncien los colchones y almohadas "Moshy cálidos", que tantas veces he visto con mi hermano.
Es que los encierros ya no duran más de tres minutos.
Ahora ya los toros no resbalan en Estafeta ni se quedan rezagados, ni dan marcha atrás en el recorrido.
Y esto está bien para los corredores, que salen en mejor estado, hacen mejores carreras, y tienen menos riesgo de ser corneados. Pero para los que vemos el encierro por la tele desde la cama en pijama, ya nos gustaría un poco de emoción, sin heridos eso sí, pero más lento.
Lo cierto es que la curva de Estafeta donde los toros derrapaban ha sido arreglada y se le pone antideslizante para que no resbale nadie, y también puede decirse que el elevado número de corredores, hace que haya menos sitio para que los morlacos puedan campar a sus anchas por las calles de la capital navarra.
Bueno esta noche con el Pobre de mí la fiesta más universal dirá adiós hasta el año que viene, y algunos apagaremos el despertador y nos quedaremos con ganas de encierros.
Yo os dejo un video de un encierro de hace más de 20 años de 8 minutos de duración, para aquellos que se hayan quedado con ganas.
1 comentario:
Lo miso, lo mismo comentamos ayer nosotors. sin los anuncios ya no son lo mismo.
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