¿Qué pensarías tú si te despiden por un error que tú no has cometido?. Si eres la pieza del puzzle que no encaja por vez número 15.
¿Qué puedes pensar si no eres lo que el otro esperaba, si no te quieren en un sitio en el que te obligan a estar?
Yo, ya no se que pensar, ni entiendo los comportamientos de la gente, ni quiero mirar atrás. Bueno, ni atrás, ni a veces hacia delante, porque no se lo que me puedo encontrar.
Nada puede ser peor, o quizás sí.
No sé como reaccionar ante aquellos que esperaban de mí otra cosa, ni sé si quiera que decirles.
No hay misión de ayuda humanitaria que me pueda ayudar a ganar esta guerra, ni palabras para explicar del todo como me siento.
No es culpa mía. Esta vez no, esta vez somos muchos los que hemos pagado con nuestro empleo un error interno que prefiero olvidar cuanto antes.
No es culpa mía aunque a algunos les de la sensación que que fui yo quien quise irme.
La vez número quince no la elegí yo, ni dije donde ni como ni cuando, simplemente me dijeron "tú no vales", esperamos a alguien mejor, y sabemos que esto es duro para todos.
Pero con eso nos quedamos. Con la dureza de la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario