jueves, 30 de abril de 2009

Menos ofertas del INAEM

Las ofertas de empleo del Inaem caen a la mitad, mientras que los parados se duplican

Fuente: 20 minutos.

No son muy buenas las noticias del INAEM, para este año, y aunque es algo que se veía venir ante la tendencia que llevamos, no te lo crees por mucho que lo veas todos los días.

Ultimamente confieso que no visito mucho las oficinas del INAEM, porque tampoco resuelves mucho en ellas, y porque cada vez están más saturadas.

Desde enero he tenido dos ofertas del INAEM y una me la enviaron cuando ya estaba cubierta y sin que el puesto fuera además el ofertado.
Y en la otra se exigían requisitos que no cumplía.

Pero ya antaño me mandaban ofertas que parara nada respondían a mi perfil, incluso hasta hace un par de años tenían mi ficha sólo con el graduado escolar.

Si hablas con un director de zona del INAEM, te dice que es que no hay que ser exigente y que ellos no tienen la culpa de nada, que el problema es de los trabajadores.

Lo que sí es cierto que las ofertas se han reducido a más de la mitad, y que piden muchas especificaciones, y el número de parados aumenta por momentos.

No voy a seguir criticando el sistema de empleo, pero la verdad es que tiene bastantes desperfectos, lo que no me hace extrañar esta situación.

La Feria de abril en Zaragoza

Sí, señores, Zaragoza siempre, desde que tengo memoria, ha celebrado la Feria de Sevilla, con sus casetas, su recinto ferial, su arco de luces, farolillos y unos rebujitos para pasar el jamón.

Y yo me pregunto: ¿Sevilla celebra las Fiestas del Pilar?
Si así fuera, lo desconozco, y aunque existen teorías que dicen que La Pilarica es la Patrona de Sevilla, no sé si en octubre los sevillanos cambian la manzanilla por el vino de Calatayud, y los pescaítos por migas con chorizo, y montan un tablao para bailar jotas.

Lo que sí es cierto es que en esta semana Zaragoza tiene un espacio cerca de la Torre del Agua, lleno de faroles, de casetas verdes y blancas, con atracciones, con un ambiente andaluz que "quita el sentio".

Quizás un día de estos me deje caer por la Feria haber que se ve, pero aquí no tendremos tanto calor (espero), ni a la creme de la creme, paseándose por el recinto.

lunes, 27 de abril de 2009

El paro sube sin freno

Cuatro millones de parados pese a que el Gobierno
afirmó que no sería posible

Así están las previsiones, las cifras hablan por sí solas, y cada vez son más las empresas que despiden a sus empleados bien por quiebra de la misma, o por ahorrar gastos en salarios, y porque nos damos cuenta de que sí dos personas nos pueden solventar una jornada laboral, para qué tener a cuatro.
Es del género tonto.


Prefiero no pensar en lo que puede llegarnos a pasar, en cuantas empresas más van a prescindir de los servicios de sus trabajadores, porque no nos damos cuenta pero los trabajadores son el mayor capital que tenemos, aunque les paguemos sueldos irrisorios, y hagan horas extras sin decir nada.
Con tal de no engrosar las listas del INEM somos capaces de tragar con todo.


Aunque todo tiene unos límites en esta vida, menos el paro que sube sin que nadie pueda controlarlo.

Menos mal que parecía imposible llegar a estos extremos.


viernes, 24 de abril de 2009

San Jorge

Ayer fue 23 de abril día de las letras, y de Aragón.
Y la verdad eché de menos actos propios de un día festivo.

Lejos de actos reivindicativos, lo único que nos demostró que era día festivo fue un espectáculo de una hora en el Paseo de la Independencia.

No hubo folklore, ni cantantes aragoneses que dieran un concierto, ni traca de fuegos, ni una degustación de productos típicos aragoneses, quizás nos centramos únicamente en los puestos de libros que estaban a rebosar a cualquier hora del día que pasaras por allí.

Eso sí, las peñas tuvieron su lugar de reunión en el parque de Las Fuentes, de manera que para los peñistas era casi como estar en "Pilares".
Pero lejos de ahí, todo era casi como un jueves normal, soleado, y lleno de claveles amarillos y rojos.

Espero que para años venideros nos de por pensar en actos más populares y festivos, que lo que sobran en Zaragoza son espacios para hacer eventos. Pero no seré yo quien de las ideas que no me pagan por pensar.

sábado, 18 de abril de 2009

Más "bizis"


Ya hace algunos meses que contamos en la ciudad, con el servicio de bicicletas públicas, "bizi".
El servicio se puso en marcha en fechas cercanas al comienzo de la Expo 2008, y ha tenido una gran acogida por parte de los zaragozanos.

Siempre habíamos pensado los habitantes de la Margen Izquierda que nos tenían olvidados, puesto que las únicas estaciones se ubicaban en el barrio del Actur.

Pero en esta última semana y con la llegada del buen tiempo, se ha ampliado la red de estaciones con bicicletas para alquilar.

Y claro, la ampliación ha tenido lugar mayoritariamente por la zona del Rabal y La Jota, con nuevas estaciones en Plaza Mozart (con un gran numero de líneas de bus para hacer enlace), Velilla de Ebro, Parque Tio Jorge... así hasta 25 estaciones por diversas zonas de la ciudad .

Sin duda es una gran iniciativa para evitar atascos y contaminación y para hacer ejercicio. Es otro modo de desplazarnos por esta ciudad que cada vez se está haciendo más grande.

Es una pena que servidora no sepa ir en bicicleta.

viernes, 17 de abril de 2009

Casarse con descuento

Ayer subió Avelino, muy suyo él, a preguntar si a las personas que cohabitan con él sin que sean familia les harían descuento al comprar en el Carrefour, que es donde pasa la mayor parte de su tiempo.

Y ya le dejaron claro que el descuento ese, sólo se hace a la familia directa (veasé madre, padre, y hermanos), y a la esposa o pareja de hecho del trabajador, es decir que si yo me voy a vivir con Avelin o un día de estos, para que me descuenten algo sin estar él, me tengo que casar con él.

¡Yo que me pensaba que esto del casmiento sólo se hacía por amor!

En fin, ya tengo yo observado que esta empresa es un poco rara para estas cosas, y tampoco veo normal que si yo le tengo que dar de comer, y lavarle los calcetines y el uniforme con olor a leche rancia y otras cosas, lo normal sería que sólo con demostrar que vivo con él ya tendría que bastar.

Pero vamos que tiempo al tiempo que qalgún día nos casaremos o algo parecido, y de todas las maneras, en los pocos huecos libres, que le deja su trabajo, ya me lo llevaré a llenar el carro, que para eso se conoce la tienda mejor que yo.

miércoles, 15 de abril de 2009

Ave y los huevos fritos

Cener un huevo frito es un placer que solo hago cuando no hay nadie en casa, pues la verdad, para la dieta no es muy recomendable.
El otro día, reté a Avelino a que me hiciera uno para cenar, y la verdad se supo defender.

El delantal no es que le favoreciera demasiado, pero en fin, al menos sabía que el huevo no se batía para echarlo en la sartén.

Conprobó que el aceite estuviera chisporrotenado dentro de la sartén, y con un miedo atroz virtió el huevo en la sartén.

Yo le decía que con una rasera fuera echando aceite por encima del huevo, y si no llego a intervenir se me cuece. Cuando ya le empezaron a salir puntillas a la clara, decidimos sacarlo de la sartén, y el maldito huevo se resistía.

Al final le pude hincar el diente y mojar un pedazo de pan en la yema que casi se queda cuajada, pero al menos hubo intención que era lo que importaba.

La próxima vez le enseñaremos a cortar la verdura a gran velocidad.

viernes, 10 de abril de 2009

Jueves Santo. Prendimiento.

Seis filas de gente me tapan la vista cuando pasas nada más iniciarse la procesión del Prendimiento. De nada me sirve estar esperando cuarenta minutos tu salida.

No pude verte hasta casi la mitad del recorrido, tampoco escucharte, pues avenida abajo, al encuentro de unos amigos, casi me olvido de que bajo un capirote estás tú.

Te alcanzo en la Puerta del Carmen, y mis ojos se llenan de emoción al ver como me guiñas el ojo, como me dices que ok con el pulgar. Ya te has acostumbrado a verme llorar, sabes que no lo puedo evitar.

El frio se mete en los huesos, pero la emoción puede con todo.
Te sigo por todo el centro, veo el descendimiento de la cruz, el silencio, y la llegada.

Tú, de poco te desmayas de calor y sin poder beber del agua que me habías pedido, y casi dejas en la calle la medalla del Cristo prendido.

A medianoche se llega al lugar de cierre, y la avenida se llena de curiosos, y el silencio se rompe cuando todos los instrumentos rompen al unísono a tocar.

El público rompe en aplausos cuando los tres pasos del Prendimiento han entrado en la iglesia y cualquier aplauso es breve si se trata de decir lo bien que ha sonado todo.

El capirote deja ver ya un rostro agotado, empapado de emoción y a un hombre abrazado a mí, buscando el agua fresca, buscando un hombro donde apoyarse.

Te abrazo, me seco las lágrimas de emoción, y entre tanta gente nos perdemos.
Cenamos, aparcamos el timbal, y emprendemos camino a casa.
Aún quedan varias horas de madrugada para ver procesiones pero el cansancio nos supera.

El hábito se guardará ya hasta el año que viene, y la lluvia hará acto de presencia en los últimos compases de esta Semana Santa que un año más me ha llenado de emoción y sentimiento.

jueves, 9 de abril de 2009

Procesionar

Prepararse para una procesión tiene sus cosas, su ritual, si se puede llamar así.
No es bueno salir cansado porque las caminatas no duran menos de tres horas.
Así, primero hay que rodearse de familiares que te ayuden con el pesado hábito (comprobado), y después con la capa en el caso que nos ocupa.

Antes de ponerse el hábito si se sale tarde conviene cenar no muy pesado, pero al menos llevar un buen guiso casero en el buche.

Y una vez perfumados nos enfundamos el hábito, con botones hasta los pies, aunque no todos los que se ven, se abrochan, y lo apretamos bien con un cíngulo anudado a la cintura.

Nos ponemos la medalla del Cristo, y la capa, con cuidado de no tirar nada alrededor, pues las capas son amplias, y en días de aire más que cofrade, pareces Supermán.

Zapatos negros, guantes blancos, y una buena maza para golpear, siempre desde el cariño, un timbal alquilado, coges el capirote que está apoyado en un palo de escoba y te vas acercando al punto de partida, por lo general iglesia céntrica de la ciudad, al que llegas con 40 minutos de antelación, para saber donde te pones.

Todo tiene que salir perfecto.

Suena el toque que marca el inicio de la procesión, poco a poco, y si acaso con retraso vas pisando la calle, procuras no desentonar ni hacer gestos extraños.

Al rato, como el día sea de estos en los que no sopla aire, ya empiezas a notar falta de oxígeno debajo del capirote, los pies empiezan a doler, los hombros ya no pueden con el instrumento, pero es tal la emoción que se siente al ver a la familia, a los amigos, al amor, que todo vale con tal de aguantar.

Esta tarde a las ocho te espero en el lado que me digas de la iglesia escolapia para verte, y para andar contigo el camino, para llegar al final, compartir un abrazo y una botella de agua, un bocadillo y otros manjares, con sabor inesperado.

martes, 7 de abril de 2009

Un lustro juntos


Eran casi las ocho de la tarde de aquel 7 de abril de hace cinco años cuando tus ojos aparecieron ante mí.
En ese instante algo ví en tí que me hizo pensar que te quería.
Nos presentaron, nos conocimos, y yo, hubiera detenido el reloj aquel Miércoles Santo en el instante que bajaste del autobús para perderte entre el gentío.

Tú por lo bajito me prometiste el cielo y lo desde lo alto yo te prometí que te vería vestido de nazareno.

No nos prometimos amor porque pensamos que era pronto aún.
Pero todo llegaría.
Yo llegué a casa pensando en que había conocido al hombre de mi vida, y aun estoy en lo cierto si pienso que no me equivoqué.
Hemos pasado muchos baches, y muchos momentos buenos, nos hemos querido y nos queremos, hemos dado pasos de gigante y hemos inventado un amor.

Aquella tarde que en principio sólo me iba a servir para traducir unas canciones al amigo que nos presentó, se convirtió en una tarde especial, difícil de olvidar.

Llevamos un lustro conociéndonos, amándonos, siendo nosotros mismos.
Cinco años de amor y amistad que espero no terminen nunca.

lunes, 6 de abril de 2009

El dolor de la Madre


El dolor de la Madre de Dios, nada tiene que ver con cualquier otro dolor.
Cualquiera de sus siete dolores son más hondos que ninguno.

Ayer, en cinco horas de procesión por las calles de Zaragoza, la Real Cofradía del Prendimiento, predicó los Dolores de la Virgen durante el Calvario de Jesús.

Fue una procesión, emotiva y eterna.Recorrido por el centro de Zaragoza, de Colegio a Colegio, y con siete paradas y un toque de carrillón en la Plaza de España desconocido para mí.

La nueva peana del Cristo de Daroca, procesionaba a paso lento por el centro zaragozano, a hombros de 8 cofrades, y acompañada del piquete.

Y detrás la Dolorosa las mantillas, las representaciones y por fin, la sección de instrumentos donde va mi propio Jesús que no tiene otra penitencia que la larga caminata, que hacer un buen toque final, y que se inunda de emoción cuando, durante el trayecto, se encuentra con el amor que le derrama unas lágrimas de emoción.

El calor era sofocante y eso hace aun más pesada la marcha.

Un año más me habeis emocionado, me has emocionado, detenido a mi altura, con los ojos llorosos ambos, cuando los capirotes se alzan al viento terminada la procesión y tu y yo nos encontramos y nos fundimos en un abrazo.

viernes, 3 de abril de 2009

Las muñecas de Famosa

Ayer estaba yo en el Carrefour, y tenía delante en la caja de pagar a una niña de unos dos años a la que habían comprado una muñeca.
Y de repente sin más, me puse a llorar.
Avelino no entendió semejante reacción, y me dijo:
-es como si yo al ver un geyperman me pusiera a llorar.

Yo de niña tenía una colección de barriguitas como la que le habían comprado a la pequeña.
Los anuncios de muñecas que hacen "sus cositas" y comen purés me traen a la mente cosas que ya debería haber borrado, no por malas, sino por antiguas.

También es cierto que hay muchas cosas que me hacen llorar, una canción, una comida especial, o unos versos de antaño escritos con mis manos.

Mirar por la ventana y ver el futuro, y a la vez el barrio donde viví mi adolescencia, pensar que no soy yo misma, que me agobia todo y no darme cuenta de que no puedo ser perfecta, un abrazo materno a diario, pensar con rabia que aquellas cosas que deseas nunca llegan y que alguien me diga que estoy estropeada o que parezco una abuela.

Son cosas que me entristecen.

Avelino, me dice que lo de las muñecas es porque quiero ser madre y yo no estoy segura de que eso sea cierto.
Pero todo lo demás debe ser síntoma de algo que no entiendo.
Me lo expliquen, que otro día les hablaré de lo que me hace reir. Lo prometo.