sábado, 23 de junio de 2012

Invasión de alinígenas

Que mi santo tiene un alien que se come cualquier cosa no es noticia. Y que hace ruidos de vez en cuando tampoco.
Vamos, que el alien no es verde y feo, no se como es, lo lleva en la barriga y le muge cada vez que tiene hambre, y a veces después de comer.

Hace ya unos meses, el aliencico de las narices se trajo a la cuadrilla al cuerpo de mi santo, el pobre se sentía solo y necesitaba que los amiguetes le ayudaran a comerse todo lo que mi chico se comía Bocadillos de dos metros con tres kilos de chorizo, una tortilla de patatas de 6 huevos para el solo, las judías verdes por toneladas... en fin, un derroche en comida.

A los amiguetes los estamos intoxicando con una medicación especial, haber si se van y nos dejan en paz, que se montan unas juergas que me despiertan a mí por la noche y eso no es plan.
Ayer mismo, puse la oreja encima del estómago de mi señor novio, y no veas tú que ruidera venía de ahí adentro. Parecía que se había roto una tubería y fluían las aguas a sus anchas.
Aun le pregunté yo al alien si no pensaba callarse después de lo que se había cenado, y el asqueroso me contestó con un alarido que casi me deja sorda, el tio quería su postre.

Ya no sabemos qué hacer, yo casi preferiría que mi santo supiera cantar que es un sonido más agradable, pero su cuerpo no entiende de canciones.
Lo suyo son más los instrumentos.
Aunque ahora que lo pienso... ¿¿no será que el muy sibarita echa de menos mis croquetas y mis fabadas y por eso hace estos ruidos tan raros?? Tendré que pensarlo seriamente, pero también el podía entender que estoy haciendo yo mi dieta y ayudarme. ¿o no?

2 comentarios:

Ajovin dijo...

Yo le metería la mano por la boca y le sacaría un Alien de esos para verlo en persona y darle una patadica en los "bebos".

Una duda…, ¿Los Alien tendrán huevos?

Medranica dijo...

Tienes que darle cosas que no les gusten para que se vayan.