No teneis vergüenza, ni cabeza ni sentido, ni nada bueno dentro del cuerpo, sólo el veneno que os lleva a chuparle la sangre al primer buenazas que se os pone a tiro.
Es desastroso tener a un trabajador que en dos semanas haya hecho 18 horas extras que nunca le van a pagar ni siquiera en beta.
Horas que voy sumándole y que ya alcanzan las 50 en todo el año. Horas que le darán de fiesta cuando no pueda disfrutarlas y que cuando las pidió no se las pudieron dar.
Horas que cualquier otro se coge cunado quiere cuando las pide, aunque sea por motivos estúpidos, sin justificar.
Es penoso, señores franceses que hagan esto.
Señores franceses y señores españoles que con un sueldo extremadamente alto, tienen a sus trabajadores a su disposición y los putean (con perdón), planteensé porque no encuentran a nadie que les aguante, de no ser por necesidad...
Tal vez sea porque las nóminas de un trabajador no alcanzan los 900 euros al mes, quizás porque no saben valorar a los que les hacen todo lo que les piden y se quedan a comer en la empresa sin saber a que hora van a llegar a su casa.
Piensen que son también personas y que con ese plan que ustedes tienen no tienen vida, ni apartamento, ni adosado n yate, ni siquiera da para una hipoteca.
Pero ustedes disfrutan pidiendo favores que saben que el más bueno del mundo les va a hacer a cambio de nada sin tener las vacaciones deseadas porque las ha cambiado para favorecer a los demás.
Mientras hacen la maleta y se untan el bronceador de factor 30, ustedes no saben que en el muelle de descarga hace 40 grados al sol y que no hay sombra, que no hay agua en los grifos y que el afable reponedor les está descargando tres camiones de leche que ustedes pidieron para no quedarse sin mercancía.
Piensen en sus riquezas y en las miserias de quien les está llenando los bolsillos de millones.
La basura me huele a podrido y ustedes me huelen a rancio por no pararse a entender que Ave y yo somos personas.
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