domingo, 28 de marzo de 2010

Lo haremos por ti

Por tí sortearé a la gente por las calles, venceré a las tinieblas que nublan ahora mismo mi cabeza, dejaré de dormir para soñar y miraré a los ojos que me hieren cada vez que me miran.

Cuando caiga el sol, te buscaré, te miraré de cerca, y lloraré a tu paso, pues hoy te quiero más que nunca aunque sea difícil de creer. Te secaré el sudor cuando llegues a casa, y te guardaré las viandas de la cena.

Llegarás cansado, con las fuerzas mermadas, y sin mí, aunque esté en tu corazón, no estaré en el momento más emocionante para todos, y lo entiendes.

Me cuesta creerlo, me cuesta no ver lo que más deseo, y lo haré por tí, para no herirnos el alma.

Los que formamos parte de tu vida, estaremos allí esperando tu llegada, esperando el paso de la procesión, queramos o no, sintamos o no, lo mismo que tu.

Esta noche de Domingo de Ramos, buscaré tu mirada, y enjugaré mis lagrimas sin que tu puedas verlo, para que no las sientas. Estaré, creo en el lugar exacto a la hora prometida como hace años, con la misma ilusión o más, de la primera vez, y sabiendo esta vez que tu eres parte de mi vida, y yo soy una parte de ti.

Y al que no lo quiera ver que le quiten la niebla de delante de los ojos.

No hay comentarios: