Siempre me ha gustado ir de compras con mi madre, porque siempre terminábamos saliendo de vacío de las tiendas y porque me invitaba a un café y era una especie de madre-amiga a la que le cuentas de todo.
Ahora cuando voy a su casa, vamos de compras también muchas veces, pero en vez de a por ropa, vamos al super a por viandas para el frigorífico de mi casa.
No es que yo la obligue, es que es una cosa mutua, ella me ayuda y lo hace con mucho gusto.
A mí me hace duelo porque cosa que le pido cosa que me compra, y luego a ella le hace duelo comprarse algo para ella para ahorrar. Porque las cosas están flojitas para todos.
Me dice siempre que es su manera de ayudarme a llegara fin de mes, y me parece muy bien, pero me da la sensación de que abuso un poco de ella y claro de mi padre también.
Hoy, que he estado con ella, me ha dicho que me quiere mucho y que todos en casa me echan de menos, y lo sé, me quieren todos del primero al último, y yo a ellos los quiero mucho también, aunque a veces no se lo diga demasiado.
¡¡¡Con la de veces que nos hemos enfadado por alguna tontada cuando estaba yo en casa... y lo que nos extrañamos ahora!!!
Mañana cenaremos a su salud con lo que nos ha comprado.
Hoy, además de comida, me ha regalado un bolso para irme de viaje.
Yo creo que nunca podré agradecerles lo suficiente todo lo que están haciendo por nosotros.
2 comentarios:
y para que estamos los padre mas que para ayudar en la medida que se puede a los hijos. Eso si luego quedara menos de herencia, pero asi vemos en que lo gastamos.
Tontadicas.
Lo cierto es que no hacemos otra cosa que no sea lo que hacían mis padres con nosotros.
ASí que luego te tocará a ti hacerlo con tus hijos. Por obligación.
Y no, las cosas no están tan mal como para que no podamos hacer esas tontadicas de gastos.
Mil besos para los dos. Repito, para los dos.
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