sábado, 15 de mayo de 2010

Un año en casa




Ayer hizo un año que nos dieron las llaves de nuestro piso.

Increible, jamás pensé que llegaría a estar un año en el piso y que nos quedaría dinero para vivir.

Las habitaciones no parecen las mismas, y la cantidad de polvo ha disminuido bastante, porque la verdad es que el piso estaba bastante cochino el día que vinimos. Al principio cada veza que veníamos sólo pasábamos la escoba, el paño del polvo y nos bebíamos algo fresco, aunque al no tener luz, la nevera aun no funcionaba.

Yo me tumbaba en el parqué, y me ponía a pensar como llenaría todo de muebles, y ahora, un año después ya está lleno de cosas, sólo faltan d colocar las cortinas que espero no ayuden a pasar menos calor en verano.



No teníamos tele, ni internet, ni ordenador, ni sofá ni ventiladores, sólo teníamos ilusión, y de esa aun nos queda.

Este piso es un sueño hecho realidad, y ha supuesto un cambio radical en nuestras vidas, aunque no nos lo creamos. Hemos aprendido mucho, y ahora la cocina casi no tiene secretos, la plancha tampoco, y tenemos libertad, y tiempo para estar juntos.

Un año después, casi nada es igual que entonces, ni siquiera el barrio, y poco a poco la vida se hace más llevadera aquí dentro aunque seguimos echando de menos algunas cosas que teníamos antes en forma de familia, y las que recurrimos una vez por semana para saber que todos estamos bien.

Mil gracias a todos los que nos han ayudado a llenar esto de felicidad, de muebles y de comida, a los amigos que nos han hecho pasar tardes amenas y a sobretodo al compañero de vida que lo hace todo más fácil y al que quiero cada día más.



Las fotos muestran la misma habitación hace un año, hace seis meses y hace un mes, es una habitación que pasó de estar vacía, a llenarse de trastos, a tener un ordenador portátil, y que ahora es un dormitorio como Dios manda, aunque de momento se usa como sala de estar. Cuando vengan los niños, osea la descendencia, les pondremos aquí la cuna y todo lo que necesita un niño para crecer sano.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Enhorabuena, semichurri, por este año de convivencia.

Me encanta leerte así, positiva, contenta y enamoradísima, aunque nunca he tenido dudas de ésto :)

Disfrutad al máximo del día de hoy.

Un besazo,

N.