domingo, 16 de mayo de 2010

Ya no voy más a ver muertos

Hace cosa de una semana, estuve en el tanatorio. Se había muerto el abuelo de unas amigas. Una pena y un descanso, por así decirlo pues el hombre ya llevaba mucho tiempo enfermo.

La verdad es que a nadie le gusta ir al cementerio no es un sitio agradable, pero a veces hay que ir por quedar bien con la familia del fallecido a mi edad, que es complicada, para consolar a los hijos y a los nietos del fallecido.

Si bien es cierto que yo fui sin poner objeción alguna, y que todas las amigas de mi edad habían subido al tanatorio porque entienden que es lo que hay que hacer, pero mis abuelos se murieron todos antes, hace ya muchos años y toda esa cuadrilla que ahora pasa de los 25 años no fue capaz de subir a consolarme a mí que la verdad me hacía falta.

Yo, fui con 17 años a varios funerales en el mismo año, y se lo que se agradece que la gente esté contigo en ese momento en el que andas atontado, nervioso, triste, pensativo, y en el que solo piensas en irte a casa.

Pero es tan triste subir al cementerio que a los hijos no los subimos, salvo que sean educados, y sepan lo que hay que hacer.

Lo voy a decir sin rodeos por si a alguien no le ha quedado claro.
Yo he ido a velar a los abuelos de todas las amigas y ninguna de ellas vino a velar a los mios y me jode, si señor, me cabrea, como cada vez quedan menos abuelos por morirse pues cada vez iré a menos velatorios, pero de los mios ya no queda nadie y nadie fue capaz de darme los abrazos que yo he repartido por ahí.

Ya se que es una entrada algo triste, pero lleva escondida un poco de rabia y de cabreo. Y de recuerdo para los que ya se fueron.

1 comentario:

Medranica dijo...

pues me parece muy bien que no vayas mas, cada no es libre de hacer lo que quiera.Pero yo siempre digo que no hay que hacer lo que no te gusta que te hagan.