Me he resfriado, vamos que me duelen la garganta y los oidos, y estoy afónica, y por si fuera poco una marea verde se ha apoderado de mí y le voy ganando la guerra con jarabes y pastillas, y descanso, claro.
Los expertos lo llaman resfriado común, pero para ser común es bastante latoso, pues entre pitos y flautas te pasas una semana echo un guiñapo, ya lo dice el refarnero que un constipado es una semana en la cama y otra semana levantado, pero no me gusta nada esto, y menos en fin de semana de puente, aunque a algunos les toque trabajar hasta el domingo,
En fin que aquí vamos despacio esperando que el limón con miel y el ibuprofeno hagan su efecto.
Ya he decidido que voy a mirar lo que hay interesante en la tele y me voy a meter en la cama hasta poco antes de que venga de trabajar Avelino, para tener la comida preparada.
Cuando estaba en casa de mi madre ella me hacía todo, y yo se lo agradecía compartiendo los gérmenes pues todos los diciembres nos hemos acatarrado las dos.
Ahora que vivo en otra casa pues eso que aunque este mala cuando no está el Avelino me tengo que apañar yo solica. Si es que como te cuida una madre no te cuida nadie.
1 comentario:
Hacerse mayor es lo que tiene, que te tienes que defender una misma de todo, bueno y malo.
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