domingo, 17 de octubre de 2010

Fin de fiestas


Quedan pocas horas para decir adiós a los pilares de 2010.
Unos pilares que podrían haber pasado inadvertidos para mí, de no ser por los actos centrales en los que he tomado parte.

El mal tiempo, y las horas extras de trabajo de mi Avelino han propiciado que hayamos pasado más horas descansando en casa que de juerga por la calle.

Las vaquillas, las jotas, y el ambiente de la calle los hemos visto por la tele, porque nos da pereza salir de casa para lo único que nos hemos movido es para ver los fuegos que se prenden y en un cuarto de hora puedes estar en casa.

Esta noche tras media hora de traca y fuegos artificiales, todo volverá a la normalidad, si bien podríamos decir que apenas la ciudad ha notado la fiesta.

De la semana de fiestas dos han sido de escuela, y casi todos menos el martes han sido día de labor, y yo siempre ha pensado que el día 13 de octubre debería ser fiesta únicamente aquí en Zaragoza, como deferencia de que el día 12 tiene fiesta toda España, y yo cuando es San Lorenzo, San Fermín, San Juan, o San Pedro, no tengo fiesta de no ser que caiga en domingo.

Y aquí en Zaragoza la fiesta se vive en Interpeñas, en el casco viejo, o en las ferias, pero poco más.

Y los conciertos a las 22 horas son para los que no trabajan al día siguiente.
En fin, no nos pensemos que estoy de mal humor, sólo es la nostalgia de que se acaban las fiestas, y me hubiera gustado disfrutarlas más pero no ha podido ser.

Lo que se ha visto y hecho ahí se queda en la retina y en las 500 fotos que tengo, y lo que no ha podido ser pues para otra vez será.

No hay comentarios: