lunes, 26 de abril de 2010

Planificar un viaje de dos días

Ave y yo estamos ya organizando las vacaciones, parece mentira pero dentro de un mes estará de vacaciones de invierno (con 30 grados a la sombra) y de verano una semana después.

Como no tenemos claro que hacer, estamos organizando planings a Soria con una miaja de nostalgia, a Madrid a perdernos porque vamos sin guías, a Barcelona ¿os imagináis al Avelino que odia casi todo lo catalán, en Barcelona? o podemos irnos a Francia a por sobres de sopas y latas (aunque sólo yo hable un poco de francés y Avelino ponga caras raras).

Bueno el caso de todo esto es sumar las cuentas de lo que cuesta el tren, el hotel (más bien hostal), la comida, el metro, los vicios, los recuerdos de la zona.... y ya cuando has sumado, te niegas a salir de casa y decides hacer dos cosas, o no gastar ni en agua mineral en dos meses o no irte ni a la esquina de vacaciones.

También piensas en que llevar en la maleta porque a día de hoy no sabes si meterte un abrigo, o una camiseta de tirantes, ni si llevar deportivas o sandalias. (Ya hablaré un día de las maletas que hace mi madre que es una experta).

Yo tengo más o menos claro lo que quiero, pero como no voy sola pues me tengo que poner de acuerdo con la otra parte y poner en orden mi cuerpo para que no me jorobe los dos días que me pienso marchar que este es muy oportuno, y la mujer de rojo siempre viene en el mejor momento.

Luego no me iré a ninguna parte por mucho que nos lo hayamos planteado pero ¿y lo bien que me lo paso organizando yo esto?

1 comentario:

Medranica dijo...

lo bueno es viajar. Pero preparándolo también se pasa bien. aunque luego no te vallas, y que jorobe un poco.